Desde el sur de los Estados Unidos de Norteamérica hasta Argentina hay un mito que ha tomado mucha fuerza desde mediados de la década de los noventa. Principalmente en zonas rurales o ganaderas donde la cría de animales es algo común, en estos lugares  se han ido incrementando las declaraciones de muchas personas que encuentran a sus animales muertos bajo condiciones muy extrañas; los cadáveres se hallan completamente tiesos, como si hubieran extraído por completo la sangre de su cuerpo a partir de tres incisiones perfectamente elaboradas justo sobre la yugular de la víctima. En algunos casos también han sido extraídos algunos órganos o partes del cuerpo, sin embargo la característica que tienen en común las declaraciones a las autoridades son las incisiones por las que afirman que se ha desangrado al animal, sin dejar rastros de sangre sobre su piel.
Estos acontecimientos han dado lugar al mito del muy conocido chupacabras, que al parecer no sólo ha tenido protagonismo en gran parte del continente americano sino también en países como Rusia y Filipinas. Quienes dicen haber visto a la criatura la describen como una especie de reptil que se sostiene sobre dos patas, con garras largas y afiladas y grandes colmillos saliendo de sus fauces, de aspecto desagradable ya que su piel se distingue entre grisácea y verdosa y en algunos casos hasta parece escamosa, pero lo más relevante de su figura son los aguijones que van desde la parte alta de su espina dorsal hasta la punta de su cola. Su tamaño varía entre 1,20cm y 1,50cm; sin embargo esa es la apariencia de la criatura según los testimonios de las primeras personas que dicen haberla visto.
Con el paso del tiempo su descripción ha variado, ahora se le menciona como un animal de apariencia pesada, que anda en cuatro patas con dientes grandes y afilados, en vez de escamas tiene una piel pelada de aspecto áspero que despide un mal olor. Sea cual sea su apariencia, ha provocado el terror en las zonas rurales del continente principalmente gracias a los medios de comunicación que han contribuido a la masificación de la noticia.
Sin embargo, la comunidad científica que ha mostrado gran interés en el chupacabras desde los primeros testimonios de su aparición, ha desarrollado una hipótesis según la cual la temida bestia, sólo es un coyote, muchas veces mezclado con lobo o perro que padece escabiosis, lo que genera el aspecto y mal olor de su piel, debido a su enfermedad el mismo se inclina por atacar animales tranquilos que no puedan huir rápidamente. Por otro lado están quienes creen que esto es solamente una estrategia para mantener oculta la verdad sobre la criatura que podría ser resultado de experimentos genéticos no declarados que se han salido de control.
También están aquellos que encuentran como una explicación más razonable el ataque por parte de criaturas extraterrestres que extraen la sangre de los animales para poder mantenerse vivos dentro del planeta, la verdad es que no hay pruebas factibles que demuestren la existencia del chupacabras, pero quienes afirman haberlo visto, dicen que ninguna hipótesis los hará cambiar de opinión respecto a la horrorosa criatura.
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El Chupacabras
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La leyenda del Chupacabras, incisiones en el cuerpo de los animales, se encuentran sin una gota de sangre en el cuerpo. Del sur de Estados Unidos hasta Argentina y en otros lugares del mundo
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